jueves, 16 de junio de 2011

El último faraón


Por alguna razón quieren destruir el valle de los caídos, que es un excelente ejemplo de cuan terrible puede ser la soberbia, que esta coronado por la cruz cómplice, que hay que quitar, para no malograr más la imagen de la nefasta iglesia.
Pienso que todos debemos proteger este testimonio de crueldad, para así llevar a los jóvenes y recordarles cuantas vidas somos capaces de torturar y asesinar, para satisfacer nuestra egolatría. Que sea una mancha de vergüenza para los responsables, es importante que los crímenes que se cometan, se paguen, aunque no sea más que a titulo formal como lo hizo con Hussein, se le juzgo, luego se celebro un juicio y luego se lo ahorco (vieron que en china la corrupción ya no está penada con la muerte).
A Osama lo asesinamos feamente, había que hacerle un juicio, supongo que los analistas consideraron que serian menores los daños colaterales, cuantos serán los atentados previstos en reacción, me encantaría saber la cifra, llámenlo curiosidad (me sorprende las cosas que somos capaces de prever).
Cuándo empezaremos a juzgar a nuestros criminales de guerra y corruptos, lavando un poco la casa, cuando se juzgará a GWBJr por el genocidio del pueblo iraquí y haber destruido Bagdad que era patrimonio de la humanidad (declarada o no) y se lo enviara a una prisión resort el resto de su vida, cuando se juzgara a los responsables de lo que hizo en Sud-áfrica. Cuando los británicos y los americanos, así como todos los pueblos “democráticos y liberales”, en España por mencionar un ejemplo, este el gobierno de los ImPUTAdos, nunca mejor dicho. ¿Cuándo pensamos pedir justicia? Los grandes ladrones del mundo se pavonean frente a las cámaras y nosotros aplaudimos. ¿Cuántos más faraones tendremos?